La victoria por 5-1 ante el Granada el domingo fue una confirmación adicional del buen trabajo que Marcelino García Toral está haciendo en el Villarreal. Fue el séptimo partido consecutivo sin conocer la derrota y la primera vez que ha conseguido enlazar dos victorias consecutivas desde que tomó las riendas del equipo.
Marcelino asumió el cargo a mediados de noviembre, siendo el tercer técnico permanente de la temporada tras los despidos de Quique Setién y Pacheta. En 14 partidos al mando ha conseguido mejorar de forma impresionante tanto los resultados como los números subyacentes del conjunto amarillo.
Todos por partido:
- Puntos: de 0,92 antes de su llegada a 1,43 con Marcelino
- Diferencia de goles: de -0,46 a 0
- Diferencia de goles (sin contar penaltis): de -0,54 a +0,14
- Diferencia de goles esperados (xG): de -0,60 a +0,20
De hecho, desde su llegada al banquillo, el Villarreal ha conseguido los resultados de un equipo capaz de pelear por los puestos europeos, con el séptimo mejor registro de puntos y el sexto mejor diferencia de xG.
Ataque
En ataque, el equipo ha mejorado mucho.
- Goles (sin contar penaltis): 1,16 por partido a 1,71
- xG: 1,06 por partido a 1,40
El Villarreal está realizando alrededor de un tiro más por partido pero es el aumento de la calidad promedio de las ocasiones creadas lo que ha impulsado la subida de su cifra de xG. Ha ido de 0,096 xG/tiro antes de Marcelino a 0,116 xG/tiro después.
Los equipos de Marcelino siempre han sabido aprovechar las transiciones ofensivas para llegar con peligro al arco contrario y parece que ya ha puesto en marcha un planteamiento que prioriza el aprovechamiento de estas situaciones. El equipo ha ido de realizar 0,54 tiros de contraataque y 2,08 tiros tras recuperaciones altas antes de su llegada a 1,14 y 3,21, respectivamente, después.
Asimismo, hay varios indicadores de un equipo que ha cambiado a un estilo de juego más de contraataque. Su porcentaje de posesión ha ido de un 55% antes de Marcelino a un 46% después, ha reducido la altura de su línea defensiva por unos dos metros y la velocidad promedio de sus ataques que terminan en tiro se ha aumentado ligeramente.
Utilizando nuestro modelo de xPass, que mide la probabilidad de que cada pase sea completado, se puede ver que en promedio el equipo está intentando pases más difíciles con Marcelino, de un porcentaje de acierto esperado de un 85,26% antes de su llegada a uno de un 82,78% con él en el banquillo, algo que normalmente significa un cambio a un estilo de juego más directo.
El cambio ve reflejado en las cifras de todos los jugadores menos Gerard Moreno:
Utilizando nuestro modelo de Pass Clustering, podemos visualizar los tipos de pase que el Villarreal está haciendo con más y menos frecuencia con Marcelino en el banquillo.
Primero, los que está realizando con más frecuencia.
Luego, los que está realizando con menos frecuencia.
En conjunto, comprueban la idea de que el equipo está jugando de forma más directa con Marcelino, con más pases largos y directos, y menos elaboración en el centro del campo.
Defensa
La organización defensiva siempre ha sido una de las pilares del éxito de los equipos de Marcelino y una de las frases recurrentes de sus primeras ruedas de prensa como entrenador del Villarreal era: "Tenemos que mejorar en defensa".
Y realmente fue así. En los 13 jornadas antes de su llegada ningún equipo de La Liga había concedido más tiros (16 por partido) o más xG (1,67 por partido) que el conjunto amarillo, y sólo dos había encajado más goles.
Con Marcelino en el banquillo, la cantidad de goles encajados ha mejorado ligeramente, de una cifra de 1,69 por partido antes de su llegada a una de 1,62 por partido después, pero los números subyacentes han mejorado bastante, de 1,67 xG concedido por partido a 1,21.
El Villarreal ha concedido 1,64 menos tiros por partido con Marcelino, pero como en ataque, el gran cambio ha sido en la calidad promedio de las ocasiones concedidas. Antes de Marcelino, sólo cuatro equipos tuvieron peores registros de xG concedido por tiro; desde su llegada, sólo tres tienen mejores registros.
Reducir la calidad de las ocasiones concedidas siempre ha sido un principio clave del planteamiento de Marcelino. De las 180 combinaciones de equipos y temporadas en nuestra base de datos de La Liga, de 2015-16 en adelante, cuatro del entrenador asturiano figuran entre los primeros 25 en cuanto a la calidad promedio de los tiros concedidos.
- 5º Valencia, 2018-19: 0,072 xG/tiro concedido
- 15º Valencia, 2017-18: 0,079 xG/tiro concedido
- 18º Villarreal, 2015-16: 0,080 xG/tiro concedido
- 25º Athletic Club, 2021-22: 0,083 xG/tiro concedido
El Villarreal se encontraría en el top 35 con su cifra actual de 0,085 xG/tiro concedido.
La razón principal de la mejora es que el Villarreal está gestionando mucho mejor las transiciones defensivas, las situaciones que suelen ofrecer a los rivales la mejor posibilidad de crear ocasiones de buena calidad.
Antes de su llegada, el equipo estaba concediendo dos tiros de contraataque por partido y 5,38 tiros tras recuperaciones altas, ambas cifras por lejos las peores de todos las temporadas de La Liga en nuestra base de datos. Marcelino ha conseguido reducir de forma sustancial ambas cifras, a 0,71 tiros de contraataque y 2,71 tiros tras recuperaciones altas.
En cuanto al cómo, una comparación de la presión ejecutada con Marcelino con respecto a los primeros 13 jornadas de la temporada muestra que el equipo está realizando menos presión en campo contrario y más presión en la primera línea de su propio tercio defensivo, algo que tiene sentido dada la ya mencionada cambio de la altura de su línea defensiva.
La historia es muy parecida si echamos un vistazo al porcentaje de acierto en el pase de los rivales del Villarreal en cada zona. Los tonos rojos indican que el porcentaje de acierto es por debajo del promedio, es decir que es más difícil completar un pase dirigido a esa zona o realizado dentro de ella con respecto al promedio de la liga.
De nuevo, vemos un equipo que con Marcelino está eligiendo defender a una altura y de una manera que dificulta mucho más la progresión del balón a zonas de peligro.
En resumen, tanto los resultados como los números subyacentes dicen que Marcelino no sólo ha conseguido enderezar el barco sino que también empezar a formar un equipo competitivo. "Vamos por el camino correcto", dijo tras la victoria ante el Granada, un camino que tiene la posibilidad de llevar al Villarreal de vuelta a una posición entre los mejores de La Liga.
