La contratación de Marcelo Bielsa por parte del Leeds sorprendió el mundo de fútbol. En junio de 2018, el renombrado entrenador argentino se hizo cargo de un equipo atrapado en la Championship, la segunda división del fútbol inglés. Lo que Bielsa ha logrado desde entonces ha sido muy notable.
Desde su descenso a la Championship en 2004, el Leeds ha sufrido mucha inestabilidad, pero ha estado yendo en la dirección correcta desde el primer partido de Bielsa. Un equipo de media tabla en la Championship se ha transformado en un club de la Premier League.
StatsBomb se enorgullece de haber prestado sus servicios al club durante la temporada 2019-20 y seguirá haciéndolo en su vuelta a la máxima categoría. Vamos a echar un ojo a algunos de los aspectos analíticos que han llevado al Leeds de vuelta a la Premier League después de 16 años de frustración.
Un impacto rápido con una plantilla consistente
En la temporada anterior a la llegada de Bielsa, la 2017-18, el Leeds terminó 13º en la Championship. Fue la sexta vez en ocho temporadas que había terminado la campaña en la mitad de la tabla. El núcleo de la plantilla heredada por Bielsa ha estado en el club durante mucho tiempo.
De hecho, nueve jugadores que tuvieron un papel importante en el ascenso estaban en el club y jugaron con regularidad durante la 2017-18. Bielsa no hizo grandes cambios a la plantilla y utilizó en gran medida lo que ya tenía. En su debut contra el Stoke ya había nombres como Luke Ayling, Liam Cooper, Ezdzhan Alioski, Pablo Hernández, Kalvin Phillips, Stuart Dallas, Mateusz Klich y Jack Harrison.
Durante la 2019-20, cada uno de esos jugadores disputó más de 2000 minutos. Gaetano Berardi, Barry Douglas y Adam Forshaw también jugaron ese día y siguen formando parte de la plantilla casi dos años después. El estilo de juego del Leeds rápidamente se hizo distintiva, como muestra esta red de pases del primer partido con Bielsa al mando:
El resto de la plantilla ha sido construido de manera relativamente barata, especialmente si se tiene en cuenta las cantidades que suelen gastar los aspirantes al ascenso. El Leeds fichó a Patrick Bamford y Barry Douglas en el verano de 2018, pero sus otros refuerzos llegaron cedidos. Fue una tendencia que continuó en la 2019-20 con las llegadas como cedidos de Ben White y Hélder Costa, este último en un acuerdo de préstamo que incluyó la obligación de compra.
Mejores números subyacentes
Bielsa convirtió un equipo de media tabla, con una diferencia negativa de Goles Esperados (xG), en uno con los mejores números subyacentes de la división. Asimismo, lo hizo muy rápidamente. En sus primeros diez partidos el equipo estaba consiguiendo cerca de 0.7 xG más que sus oponentes por partido. Es decir, su producción subyacente estuvo cerca de siete goles mejor que la de sus oponentes a través de estos diez partidos.
A partir de ese momento, a lo largo de dos temporadas, sus números subyacentes sólo empeoró una vez, entre enero y febrero de 2020, e incluso entonces, todavía creó tres goles esperados más que sus oponentes en su peor tramo de diez partidos. En los tramos mejores, frecuentemente creó 11 o 12 goles esperados más que sus oponentes. Los números subyacentes del equipo han sido muy buenos a lo largo de dos temporadas:
Sin embargo, los números subyacentes no representan la realidad y los inevitables vaivenes de la varianza han producido dos tramos en los que los resultados variaban mucho respecto a los goles esperados.
Primero, el Leeds perdió su puesto de ascenso directo en el tramo final de la 2018-19, en parte porque en sus ocho partidos finales rindió diez goles por debajo de lo esperado. Luego, un giro positivo de dimensiones similares, en gran parte en ataque, selló su ascenso a la Premier League tras el regreso del parón de 2019-20:
La salida de los puestos de ascenso directo en la 2018-19 provocó la aparición de una narrativa común sobre los equipos de Bielsa, en concreto que se cansan en el tramo final de la temporada. Es cierto que el estilo de juego del Leeds requiere un alto nivel de aptitud física, pero en este caso no existe evidencia concreta de un bajón global.
En los resultados, sí, pero no en cuanto al nivel de las actuaciones. En términos de xG (sin contar penaltis) el Leeds tuvo el mejor ataque de la división en la 2018-19, con casi 71 goles, pero el mismo total de goles reales fue sólo el quinto mejor registro de la liga. No hay nada intrínsecamente malo en igualar los números esperados, pero los equipos que ganan títulos suelen superarlos.
Ese tipo de impulso a corto plazo puede hacer una gran diferencia y en este caso, cada uno de los equipos que logró el ascenso superó sus números esperados. Sin embargo, fue el otro extremo del campo el que resultó más costoso para el Leeds en la 2018-19. Al recibir 50 goles, encajó alrededor de 13 goles más de lo esperado. Podemos ver de dónde vino la mayoría de la diferencia si miramos los tiros a puerta de larga distancia:
En la 2018-19, tanto Peacock-Farrell como Casilla tuvieron problemas en parar los tiros de larga distancia.
En líneas generales, tiros a puerta desde cualquier posición aproximadamente terminan en gol un 30% de las veces. En la 2018-19, los porteros del Leeds encajaron goles a este ritmo sólo desde tiros de larga distancia. Desde los tiros dentro del área, el Leeds encajó goles a un ritmo cercano al esperado. Asimismo, vale la pena echar un ojo a los goles marcados y recibidos por el Leeds con el marcador igualado.
En esa situación, realizaron casi 150 tiros más que sus oponentes pero marcaron sólo un gol más. La diferencia ocurrió en ambos extremos del campo. El ataque marcó cerca de cinco goles menos de lo esperado mientras que la defensa encajó casi 11 más. Este es un clásico ejemplo de como desde una perspectiva analítica, podemos observar que el proceso es bueno mientras que los resultados son más variables. Teniendo en cuenta los números subyacentes del Leeds en la 2018-19, no había razón de dudar en la capacidad del equipo de Bielsa para luchar otra vez para el ascenso directo en la 2019-20.
Un estilo único
El estilo de juego del Leeds ha generado mucho interés, incluso hasta el punto que el Huddersfield Town ha contratado a uno de sus asistentes, Carlos Corberán, como entrenador principal. Vale la pena preguntarse si un equipo es capaz de presionar con el vigor con el que presiona el Leeds, y con ese estilo lograr éxito, ¿es algo que otros equipos podrían replicar? Esta visualización muestra cómo la proporción de acciones defensivas, incluyendo nuestros exclusivos datos de presión, de cada equipo a los pases de sus rivales compara con la media de la Championship en cada una de seis zonas verticales.
Los tonos rojos indican que el equipo en cuestión hizo una proporción superior a la media de acciones defensivas en esa zona. Podemos ver que el estilo del Leeds fue como el de ningún otro equipo de la Championship en la 2018-19. De hecho, como pocos del mundo:
El Leeds estuvo enormemente activo en todas las zonas del campo, excepto cerca de su propia portería. Este perfil es inusual. Los equipos buenos que hace presión alta (Liverpool, Manchester City) normalmente son muy activos en campo contrario y no tanto en otras zonas. El Leeds cubre casi todo el campo. Podemos ver cómo este estilo ha persistido cuando vemos el mismo gráfico para la 2019-20:
Entre los 92 (91 en la 2019-20) clubes de las primeras cuatro divisiones del fútbol inglés, el Leeds ocupó el segundo puesto en cuanto a su agresión (definida como el porcentaje de las acciones defensivas del equipo registradas a dos segundos de que un oponente reciba el balón) en ambas temporadas, marginalmente detrás del Manchester City en la 2018-19 y del Barnsley en la 2019-20. De hecho, ligeramente aumentó su cifra en la 2019-20, de un 29% a un 30%.
Seguridad defensiva
En la temporada 2019-20, el Leeds nunca bajó del quinto lugar en la clasificación y después de una victoria contra el Luton el 19 de noviembre, nunca terminó una jornada de partidos fuera de los dos primeros puestos. Su ataque no superó de nuevo su xG, pero un enorme siete autogoles por parte de sus oponentes ayudó a acortar la brecha. Fue en defensa donde se vio el verdadero cambio, con un total de 35 goles recibidos que fue mucho más cerca de la cifra esperada que el de la 2018-19.
Al ganar cinco partidos antes del parón y siete de nuevo al regresar, el Leeds encajó sólo cinco goles y un promedio de poco más de medio gol de xG por partido. Sus oponentes promediaron menos de ocho tiros por partido y los que realizaron fueron de una calidad media realmente miserable. La debilidad de los equipos que hace presión alta suelen estar en la calidad de las ocasiones que conceden cuando el oponente es capaz de eludir su presión.
Sin embargo, el Leeds de Bielsa ha recibido una baja volumen de tiros sin sacrificar su habilidad de evitar tiros de buena calidad. Este aspecto será difícil de replicar en una liga superior, pero sus números defensivos durante el tramo final de la temporada fueron casi perfectos:
¿Algo de suerte en la finalización de sus oponentes? Sí, pero podemos ver la falta de ocasiones de buena calidad (¡dónde está la roja!), la escasez de tiros de pie desde zonas centrales (¡pocos hexágonos!) y casi nada en el área pequeña. Irónicamente, los únicos dos goles que el Leeds recibió desde fuera del área esta temporada llegó en este tramo de partidos.
Como era entonces, es ahora
Como señalamos antes, el primer partido de Bielsa fue en casa contra el Stoke. Ochenta y siete partidos y 704 días más tarde, el mismo encuentro se repitió. Una vez más el Leeds dominó el marcador, esta vez con una victoria por 5-0. Si comparamos las redes de pases de estos dos partidos, podemos ver que a pesar de que habían pasado casi dos años, la manera en que jugaba el Leeds, las posiciones que ocupaban sus jugadores y la estructura general del equipo habían variado muy poco:
Fuera de los dos primeros, pocos equipos de la Premier League son capaces de jugar con un estilo cercano al que Bielsa exige a su equipo. Los otros equipos tendrán que prepararse para un duro encuentro. Como único punto de referencia, la única vez que este Leeds se ha enfrentado a un rival de la Premier League fue en un entretenido partido de la FA Cup contra el Arsenal.
En el segundo tiempo, el Arsenal fue mejor y el Leeds perdió 1-0, pero los que vieron el partido recordarán un primer tiempo en que el Leeds abrumó a los Gunners por su energía y viveza. Realizó 15 tiros a los tres de su rival sin lograr abrir el marcador. Contra los equipos más débiles de la Premier League, ese tipo de juego dará dividendos, y el Leeds debería ser capaz de ganar varios partidos de esta manera.
Asimismo, una buena defensa en una temporada de ascenso suele ser un pronosticador de una defensa aceptable en la Premier League. Pocos equipos estarán mejor preparados tanto físicamente como tácticamente. La Premier League será mejor por la presencia del fútbol de Bielsa, y los partidos contra el Manchester City de Pep Guardiola y el Liverpool de Jürgen Klopp deberían ser particularmente entretenidos. El Leeds ha vuelto a la máxima categoría, y se lo merece.